Al usar vehículos voluminosos o maquinaria pesada como tractores o grúas, debes respetar ciertas normas, poseer una licencia y contar con la precaución y responsabilidad necesaria para reducir al mínimo los riesgos.
Ten en cuenta que en 2022, el 73% del total de accidentes de mutualidades (214.274) fueron laborales, donde entre los riesgos más destacados se encuentran caídas, exposición a sustancias tóxicas, atrapamientos y accidentes con maquinaria pesada, donde este último puede reducirse en gran medida con una correcta utilización de los vehículos.
En Chile, hay empleos en una amplia gama de rubros, tales como la agricultura, construcción, transporte, minería y otros que requieren de ciertas habilidades de conducción de maquinaria y vehículos pesados. Entre los más comunes se encuentran las grúas horquilla, excavadoras, sembradoras y compactadoras (por mencionar algunos).
Sin embargo, para poder acceder a ellos requieres de cumplir con ciertos requisitos y normas. No debes olvidar que a la hora de conducirlos es muy importante tener en cuenta aspectos como tu experiencia, la seguridad y otros esenciales que se detallan más adelante.
Este documento certifica que tienes los conocimientos, habilidades y capacidades físicas y psicológicas para conducir este tipo de vehículos. En la legislación, las licencias de maquinaria pesada entran en la clase D, con la que puedes conducir tractores, grúas, retroexcavadoras, entre otras.
Como operador de maquinaria pesada es fundamental mantener este permiso vigente, no solo para cumplir con la normativa, sino para demostrar tus habilidades y dar a conocer que estás en las condiciones aptas para hacerlo sin representar un riesgo para los demás.
Toda empresa que use este tipo de vehículos debe contar con un manual de prevención de riesgos laborales en maquinaria pesada.
Es importante que lo leas y sigas sus recomendaciones, entre las cuales es común encontrar:
Puedes ser un conductor experto, tener al día tu licencia para maquinaria pesada y cumplir todas las normas de seguridad, pero si los vehículos no permanecen en buenas condiciones pueden sufrir fallas mecánicas que deriven en accidentes.
Esto se evita con un mantenimiento preventivo, que implica revisar de forma periódica y planificada los distintos componentes. Esta práctica, además de disminuir la probabilidad de accidentes, ayuda a prolongar la vida útil de la máquina, reduciendo costos en mantenimiento y el tiempo en desuso.
Antes de poner en marcha el motor, se deben verificar diferentes aspectos como niveles de agua y aceite, neumáticos, piezas hidráulicas, verificar que no haya fugas, acumulación de residuos, fallas en luces, entre otros.
Este hábito mantendrá la maquinaria y los vehículos pesados en condiciones seguras para su operación, evitando incluso daños mayores. En caso de que la máquina no cumpla con los mínimos estándares para su uso, deberás reportar a los responsables para solucionarlo antes de iniciar el trabajo.
Operar maquinaria y vehículos pesados exige la atención de todos tus sentidos y una máxima concentración, debido a las complejas y demandantes condiciones en que se suele trabajar y por su gran tamaño que dificulta una visión clara de lo que ocurre alrededor.
Esa es la razón por la que debes evitar a toda costa trabajar cuando tengas fatiga o te encuentras bajo el efecto de bebidas alcohólicas o sustancias estupefacientes o psicotrópicas, ya que las consecuencias podrían ser mortales.
Es vital mantener una comunicación constante con el equipo de trabajo en faena, carretera o en el sitio donde se vaya a emplear la maquinaria. Esto garantiza que todos estén al tanto de las operaciones que se están llevando a cabo, lo que incluye informar y delimitar las maniobras que se van a ejecutar mediante señales claras, sistemas de radio, entre otras.
Por lo que:
Cada máquina tiene un límite de carga máximo a soportar. Sobrepasarlo puede provocar daños en la misma y poner en riesgo la seguridad de los trabajadores. Por lo tanto, es fundamental conocer al detalle la ficha técnica del vehículo y respetar sus limitaciones.
Al margen de los importantes riesgos de accidentes asociados al exceso de peso, podrías reducir de forma acelerada la vida útil del equipo.
Al igual que en un vehículo convencional, al conducir maquinaria a una velocidad imprudente aumenta los riesgos de accidente. De hecho, el 23% de los accidentes de mutualidades son ocasionados en el trayecto hacia el trabajo. Por lo que debes hacerlo con responsabilidad, de manera segura y adecuada a las condiciones del sitio, sobre todo tomando en cuenta el tipo de terreno, ya sea asfaltado, tierra, en pendiente, entre otros.
A su vez, es fundamental tener en cuenta la distancia de frenado de la maquinaria y asegurarte de mantener un margen con otros vehículos y trabajadores.
En conclusión, como operador de maquinaria pesada, sabrás que estas son herramientas esenciales en muchas industrias y proyectos de construcción, pero que deben utilizarse con precaución.
Ya conoces los tipos de maquinaria pesada que puedes conducir, pero más valioso es integrar los aspectos mencionados a la hora de manejarlas, para así garantizar la seguridad óptima en el sitio de trabajo y evitar consecuencias fatales.