9 agosto 2021 · minutos de lectura

7 tips para proteger tu auto antes de tener que ir al servicio técnico

Siempre será necesario hacer una visita eventual y planificada al Servicio Técnico de la marca de tu automóvil o taller de confianza. Sin embargo, si estas visitas se hacen sorpresivas y constantes, tu rutina, comodidad y bolsillo, se verán afectados.

Los siguientes tips te ayudarán a evitar que esto ocurra.

1. Revisa el estado de los frenos

Los frenos son sinónimo de seguridad. Por lo tanto, merecen atención periódica. Los fabricantes recomiendan como medida preventiva un cambio de pastillas de frenos a los 20 mil kilómetros, especialmente en el caso de los delanteros.

No obstante, mucho dependerá del tipo y frecuencia de uso que le des. En este sentido, si sientes una vibración o sonido irregular cada vez que pisas el pedal de freno, chequea la condición de los mismos, ya que en muchos casos es una señal de desgaste. En tal caso, tendrás agendar hora para una revisión en el Servicio Técnico.

2. Mide el nivel de los fluidos

La mantención de autos implica verificar constantemente los líquidos que permiten que todo funcione correctamente. Por ejemplo, puedes tener a la mano una lista de chequeo de los siguientes líquidos:

  • Refrigerante del radiador.
  • Líquido de frenos y de dirección.
  • Combustible.
  • Aceites de motor y caja.

Si aún no sabes cómo cambiarlos y cada cuánto tiempo hacerlo, puedes verificarlo en este video que en DercoCenter hemos preparado para ti: Principales líquidos del auto y cómo cambiarlos.

3. Amortiguadores

Cada 20 mil kilómetros de uso puedes realizar una revisión simple. Sin embargo, el tiempo de vida promedio que dan los fabricantes es de 60 mil kilómetros.

¿Qué señales te pueden indicar que necesitas agendar hora al Servicio Técnico por los amortiguadores? Vigila el desgaste irregular de tus neumáticos, la inestabilidad en el volante o el rebote prolongado del auto.

4. La presión de aire y el estado de los neumáticos

Conviene repasar las señales por las que conviene revisar y cambiar los neumáticos. Asegúrate de que tienen la presión óptima de aire en cada rueda. Recuerda que a veces, puede cambiar la presión recomendada por el fabricante entre los neumáticos delanteros y traseros. (entre 30 a 35 psi).

Estar por debajo o por encima de los niveles de psi indicados por el fabricante puede provocar desgastes que deforman el dibujo original del neumático acortando su efectividad. 

5. Mantenimiento de la carrocería

La mantención de autos en su carrocería implica su limpieza semanal y evitar exponerlo mucho tiempo al sol. También puedes utilizar cera protectora para protegerlo del polvo y contaminación.

Además, internamente puedes aplicar un paño húmedo en el tablero y evitar comer dentro del habitáculo. Especialmente en este contexto de cuarentena, es importante mantener buenos hábitos de higiene incluso dentro de tu auto.

6. Nivel de batería

Las baterías tienen una carga constante de entre 11 y 12,6 voltios para que el vehículo pueda encender y utilizar sus componentes eléctricos. Chequear estos niveles con un voltímetro una vez al mes puede ser buena idea. 

Como ves, no tienes que ser un experto automotriz para saber cómo cuidar un auto. Pero siempre es apropiado mantener buena comunicación con un centro de servicio técnico automotriz de la marca o de confianza. Especialmente cuando no se tienen herramientas de verificación específicas como esta.

7. Correas

Las correas de distribución deben ser verificadas semanalmente. Estas pueden rendir de 60 mil a 160 mil kilómetros antes de requerirse un reemplazo. Por regla general de mantenimiento preventivo, algunos talleres prefieren reemplazar las correas, aun cuando éstas no se vean con desgaste, como medida de prevención y evitar dañar el motor en el futuro.

Saber cómo cuidar un auto te ayudará a evitar una visita inesperada o de urgencia al taller. al taller. Recuerda planificar en tu calendario fechas para visitar nuestro taller de servicio técnico en DercoCenter. Un equipo de profesionales en el área se encargarán de asegurarse que tu vehículo tenga una salud óptima. Esto se traducirá finalmente en seguridad y ahorro para ti y tu bolsillo.